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Congreso México aprueba que Guardia Nacional pase a control militar

CIUDAD DE MÉXICO, 9 sep (Reuters) – La cámara de senadores de México aprobó el viernes una iniciativa del mandatario, Andrés Manuel López Obrador, para que la Guardia Nacional, una policía militarizada, pase a manos de la Secretaría de Defensa (Sedena), una maniobra que los críticos aseguran militarizará la seguridad pública en el país.

Los cambios, que ya habían sido aprobados el fin de semana de manera expedita por la cámara baja, dan a la Sedena el control operativo, financiero y administrativo de la Guardia Nacional (GN), que actualmente se encuentra bajo el mando de la Secretaría de Seguridad, liderada por una civil.

A principios de 2019, impulsada por López Obrador, la GN entró en funciones con la finalidad de combatir al crimen organizado y acabar con la corrupción enquistada en su predecesora, la Policía Federal.

Sin embargo, activistas y opositores han criticado a la novel corporación por supuestas violaciones a los derechos humanos durante sus operativos para contener la migración a través del país.

«La política de López Obrador está ensangrentando a México, la estrategia de seguridad no funciona, la militarización no es la solución», opinó Kenia López, senadora del opositor Partido Acción Nacional (PAN). «Los militares deben estar en los cuarteles porque tienen un entrenamiento distinto a la policía», agregó.

La senadora Lucy Meza, del oficialista Movimiento Regeneración Nacional (Morena) justificó su voto asegurando que la iniciativa, aprobada de madrugada con 71 votos a favor, 51 en contra y dos abstenciones, «tiene como objetivo recuperar la paz pública en el país y garantizar la seguridad».

Especialistas aseguran que los cambios, que entrarían en vigor un día después de publicados en el diario oficial, podrían ser rebatidos en la Suprema Corte de Justicia, ya que contravienen la Constitución, que asegura que la seguridad pública debe estar a cargo de un mando civil.

Cuando asumió como presidente de México a fines de 2018, López Obrador prometió regresar a los militares a los cuarteles pero los uniformados han seguido al mando de la seguridad pública del país, que va camino a cerrar su sexenio más violento en la historia moderna.