home Editoriales ¿Cómo elegir el mejor abogado para resolver una situación jurídica?

¿Cómo elegir el mejor abogado para resolver una situación jurídica?

Uno de los retos para cualquier especialista de derecho es saber con exactitud qué tipo de conflicto judicial se le presenta para determinar la estrategia legal pertinente. Sabemos que el Derecho es muy amplio, que existen desde las ramas troncales como son el Derecho público, el privado y recientemente se ha añadido a esta división tradicional el Derecho social.

Por otro lado, es realidad es muy difícil para un abogado dominar todas las áreas y ramas del Derecho. Por lo cual, se requiere de la especialización en algún campo específico para conocer los principios, conceptos, fundamentos y las características muy particulares de los procesos jurídicos que varían de rama en rama del Derecho.

Debido a esto, una muestra de irresponsabilidad y falta de ética es la pretensión de abogados que se promueven para resolver cualquier tipo de asunto jurídico, ya sea civil, laboral, penal o administrativo. Esto debe ser una mala señal, ya que es necesario para una mayor garantía de éxito en el proceso, que los abogados se vuelvan expertos en una rama del Derecho.

Por eso, en hay despachos jurídicos que se ofertan como buffets jurídicos que se conforman por diversos especialistas de derecho en las ramas que atienden. No se trata de que un solo abogado sea el que resuelva cuanto asunto es de su conocimiento. Como también hay despachos que son especialistas en algún campo específico como los abogados penalistas Barcelona que garantizan los mejores resultados en el campo del estudio y la defensa en asuntos jurídicos penales, sobre los delitos y los procesos judiciales que los previenen o sancionan.

Luego entonces, ¿qué podemos considerar para elegir a un abogado?

Lo primero sería olvidarse de los amigos que conocemos son especialistas en Derecho. Mucho menos si no son de la materia legal. Se entiende que todos tengamos una red de apoyo y la amistad puede ser una fuente para vencer los obstáculos. Pero se debe tener en cuenta que un asesoramiento jurídico es igualmente un trabajo que requiere de una remuneración económica y un trabajo objetivo para que el asesoramiento no se convierta en un problema que dañe la amistad al no conseguirse los resultados esperados.

Hay que considerar el grado de especialización del abogado en el tema. Conocer su reputación en otros casos similares, no tanto en su apariencia, para evaluar la pertinencia de su contratación. Esto no exenta en otra recomendación que afirma que es también necesario tener una segunda o más opiniones sobre como otros abogados solucionarían el caso. De forma general, las primeras sesiones donde se plantea el problema no generan costo para el cliente. Aprovecha esa primera cita para valorar la calidad de trabajo de diversos abogados.

Es importante que se plantee un presupuesto de cuanto sería el costo del proceso judicial que debe abarcar no solo los honorarios del abogado, sino también, de los derechos que se deben pagar como cuotas administrativas y la consideración de los peores escenarios que pueden ser procesos judiciales que deberán complementarse para que se continue con el procedimiento.