La secretaria de la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, Dulce María Méndez De La Luz Dauzón (MC), se comprometió a trabajar para que el presupuesto en materia de discapacidad sea ejercido de manera eficiente y con transparencia.
La legisladora destacó la importancia de la vinculación del Poder Legislativo con las organizaciones civiles, para más allá de partidos, trabajar con los grupos vulnerables.
Durante la presentación del “Movimiento Tres Doce”, aseguró que al igual que las asociaciones civiles, posee la vocación de trabajar por este sector de la población. “Lo hacemos desde el corazón y lo único que deseamos es el cien por ciento de inclusión de personas con alguna discapacidad”.
El movimiento busca incidir en organismos públicos, privados y de gobierno para lograr políticas públicas transversales en la materia. Está integrado por la Confederación Mexicana de Organizaciones en favor de la Persona con Discapacidad Intelectual, Fundación Humanista de Ayuda a Discapacitados, asociaciones Libre Acceso, Vida Independiente, Arte Down, Fundación Rincón Gallardo, Red Nacional para la Prevención de la Discapacidad en México, entre otras.
La secretaria de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Julieta Macías Rábago (MC), coincidió en que para lograr total inclusión de las personas con discapacidad, es necesario que los tres órdenes de gobierno y sociedad civil trabajen en conjunto, pues “todos somos un mismo México y una misma sociedad”.
“Estamos con ustedes y tengan por seguro que les bridaremos todo el apoyo que requieran, ojalá se logren grandes cosas”.
Lídice Rincón Gallardo, presidenta de la Fundación Gilberto Rincón Gallardo, A.C, explicó que el “Movimiento Tres Doce” tiene como propósito la inclusión de las personas con discapacidad en el ámbito de educativo, laboral y de salud y, con ello, lograr que obtengan una vida independiente y autónoma.
“Con el Movimiento Tres Doce, las más de 14 millones de personas con discapacidad no sólo serán escuchadas, sino que se trabajará para llevar a cabo acciones que muevan a todos hacia la inclusión, a fin de formar una sola sociedad y un México mejor para todos”.
Hizo un llamado a los legisladores para que el tema de integración sea transversal, es decir, que exista armonización legislativa, no sólo a nivel federal, sino en el ámbito local, para que cada región del país cuente con una política pública en la materia, donde participen las organizaciones y activistas.
“Estamos dispuestos a echar mano de toda nuestra experiencia de negociar y a hacer alianzas para visibilizar a las personas con discapacidad como una causa de justicia social, más que como un asunto de minorías”.
El movimiento se ha planteado generar una alianza con el gobierno, academia, empresarios y organizaciones para que la suma de todos permita el fortalecimiento de una cultura pública inclusiva de espacios accesibles y libres de discriminación.
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