Estudia. El Derecho se está transformando de forma continua. Si no sigues los siguientes pasos serás cada día peor abogado.
Piensa. El Derecho se estudia todos los días pero se ejerce pensando.
Trabaja. El Derecho está siempre al servicio de la Justicia.
Lucha. Debes luchar por el Derecho, pero si en algún momentos ves que existe conflicto del Derecho con la Justicia, siempre tienes que velar por los intereses de la Justicia.
Tolera. Tolera siempre la verdad de los demás (adversario incluido) de la misma forma que quieres que sea tolerada tu verdad.
Paciencia. Debes ser paciente en todo momento ya que el tiempo se venga de las cosas que se hacen sin él.
Fe. Ten fe en el Derecho, ya que es el mejor instrumento para el ser humano. Ten fe en la Justicia como consecuencia del Derecho. Ten fe en la Paz como sustituto de la Justicia y más que nada debes tener fe en la Libertad, sin la cual no hay ninguna de las demás cosas.
Olvida. Olvida tan pronto tu victoria como tu derrota en tu profesión, ya que si vas aumentando tu rencor en cada derrota no llegarás a ningún lado.
Ama al derecho. Como último mandamiento del decalogo del abogado debes tener en buena estima tu profesión de abodago de tal forma que consideres un honor para ti proponerle que se haga abogado a tu futuro hijo.