home Generales ¿Cuál es la diferencia entre un traductor jurídico y un traductor jurado o traductor perito oficial?

¿Cuál es la diferencia entre un traductor jurídico y un traductor jurado o traductor perito oficial?

En un mundo global y tan conectado como el que ahora vivimos, la realidad de los hechos y los actos jurídicos trascienden no solo las fronteras físicas, sino también, las idiomáticas ante la necesidad de intercambiar entre los humanos de diversos orígenes culturales la realización de actos que involucran documentos legales.

Es por ello de que se abre la necesidad de contar con las herramientas lingüísticas necesarias para la traducción necesario de los documentos legales que por lo cual gocen de la certidumbre y validez jurídica para realizar algún trámite o proceso legal. Para entendernos mejor, debemos considerar que una traducción es una actividad que comprende la interpretación del significado de un texto cualquiera en una a otro texto equivalente en otra lengua diferente.

El resultado de este proceso se conoce como una “traducción” que debe involucrar una correcta, pertinente y verdadera interpretación, es decir, del significado equivalente, de las palabras extranjeras en el sentido que son usadas conforme a las ideas del texto originario. En el caso de los textos jurídicos, el tema cobra mucha importancia por la necesidad de contar con un traductor jurídico que cumple con las condiciones para que la problemática de la traducción misma y con la legalidad que los casos ameritan.

Aunque existen muchos sistemas o programas electrónicos de traducción que los abogados pueden adquirir ya sea para instalar en sus equipos de cómputo o usarlos por vía online. Sin embargo, es importante señalar que es necesario contar con un traductor jurado o traductor perito oficial. En el caso de España, se le llama traducciones jurídicas juradas por la certeza de que se cuenta con todos los elementos para legalizar la conversión de un idioma extranjero un documento con toda la aplicación y certeza legal.

En el caso de México y muy especialmente en Yucatán, hemos tenido una emigración importante de estadounidenses, canadienses y varios europeos que son motivados a vivir en nuestras ciudades por la limpieza en el medio ambiente y los buenos niveles de seguridad. Algunos de ellos no saben mucho menos dominan nuestro idioma español. Pero es una realidad que celebrar actos jurídicos como la compraventa y arrendamientos de casas-habitación y, por ende, la documentación que se requisita para esos procesos vienen en otros idiomas los cuales se deben certificar el contenido y la autenticidad de estos. }

Esto abre muchas posibilidades de desarrollo dentro de la realidad y la exigencia de preparación de los abogados, como también, con contar con el acceso a otros tipos de recursos de trabajo como el uso de sistema de traducción o de peritos de traducción lingüística para cumplir con la celebración de los actos jurídicos donde se involucran gentes extranjeras. La movilidad mundial por la apertura de fronteras para el intercambio de información y del comercio nos plantean nuevas realidades que debemos explorar y saber apreciar en la justa medida de las necesidades que nos envuelven. Por lo cual no podemos confiar en la traducción de sistemas simples porque no hay una garantía de tales puedan cubrir las necesidades de certeza oficial en documentos legales.