Washington D.C. – La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) publica el informe de seguimiento de recomendaciones sobre personas privadas de la libertad en Guatemala, Honduras y El Salvador. Este documento identifica las medidas de cumplimiento y los desafíos en la implementación de las recomendaciones dirigidas a estos tres países sobre los derechos de esta población.
El informe verifica el cumplimiento de siete recomendaciones del informe de país de Guatemala de 2017; cuatro del informe de país de Honduras de 2019, y cinco del informe de país de El Salvador de 2019, identificando las medidas de cumplimiento adoptadas desde el año siguiente a la publicación de cada informe. Estas recomendaciones fueron seleccionadas para el seguimiento en este informe porque solicitan medidas estatales para abordar las problemáticas que aquejan a las personas privadas de libertad en los tres países.
Para la elaboración del informe, la Comisión solicitó información a los Estados involucrados, a las organizaciones de la sociedad civil y a las instituciones nacionales de derechos humanos respectivas. Con base en la información recibida, analizó el nivel de cumplimiento de cada recomendación, atendiendo los lineamientos y categorías de sus Directrices Generales de Seguimiento. Además, el documento da cuenta de la información y medidas que todavía son necesarias para avanzar en la implementación.
El informe resalta que Honduras, El Salvador y Guatemala enfrentan desafíos comunes para la implementación de recomendaciones internacionales sobre el respeto y garantía de los derechos de la población penitenciaria, los cuales datan de tiempo atrás y son el resultado de la desatención histórica del problema carcelario por parte de los Estados.
Por su parte, buena parte de las acciones que la CIDH identificó como medidas dirigidas al cumplimiento parcial de las recomendaciones se desarrollaron en respuesta a la situación de riesgo que enfrentó la población penitenciaria en estos países ante la irrupción de la pandemia de COVID-19.
Este informe se elaboró considerando que el cumplimiento integral de las recomendaciones de la CIDH es un propósito fundamental para asegurar la plena vigencia de los derechos humanos en los Estados miembros de la OEA, así como para contribuir al fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. En este sentido, espera que sea una herramienta útil para el trabajo de las entidades a cargo de su cumplimiento, y para las instituciones y organizaciones comprometidas con la defensa de las garantías de las personas privadas de la libertad.
La CIDH es un órgano principal y autónomo de la Organización de los Estados Americanos (OEA), cuyo mandato surge de la Carta de la OEA y de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. La Comisión Interamericana tiene el mandato de promover la observancia de los derechos humanos en la región y actuar como órgano consultivo de la OEA en la materia. La CIDH está integrada por siete miembros independientes que son elegidos por la Asamblea General de la OEA a título personal, y no representan a sus países de origen o residencia.
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