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Se requieren mayores inversiones para beneficiar a los campesinos en zonas marginadas

 

Ante diputados de la Comisión Especial de proyectos productivos en zonas marginadas, funcionarios de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) señalaron que se requieren mayores inversiones en el sector del campo, principalmente para beneficiar a las regiones menos favorecidas. 

En el encuentro, realizado en las instalaciones del Palacio Legislativo de San Lázaro, indicaron que el programa Proyectos Productivos (FAPPA) tiene para 2017 un presupuesto de 724 millones de pesos, con lo cual se pretende apoyar 2 mil 878 proyectos, para beneficiar a 17 mil 881 personas. Su finalidad es que las unidades económicas rurales conformadas por pequeños campesinos incrementen la disponibilidad de alimentos. 

La instancia legislativa que preside el diputado Pablo Bedolla López (PRI), conoció detalles de los programas Fomento a la Agricultura; PROCAFÉ e Impulso Productivo al Café; de Apoyos para Productores de Maíz y Frijol (PIMAF); Proyectos Productivos (FAPPA); Arráigate Joven Impulso Emprendedor; Atención a Siniestros Agropecuarios; Extensionismo, Desarrollo de Capacidades y Asociatividad Productiva, entre otros, los cuales buscan apoyar a los campesinos de las zonas marginadas. 

El diputado sin partido, Manuel Espino pidió conocer qué tanto se han aliviado las cargas sociales con los programas de Sagarpa en las comunidades más marginadas, toda vez que en 2016 había regiones donde era difícil hacer llegar los apoyos por tecnicismos, a pesar de la nobleza de los programas. 

“En la práctica, no llegan las acciones gubernamentales en zonas de difícil acceso o porque las costumbres no les permiten incorporarlas, ya que ellos esperan que se les dé y no se les enseñe a producir”, añadió. 

María Verónica Muñoz Parra, diputada del PRI, se congratuló de que existan acciones humanitarias de ayuda como a una mujer de campo que falleció por cáncer; es bueno tener este blindaje, y hacer el bien, en pro de una población que en muchas ocasiones está sola y se encarga de sus parcelas, ya que se compone de pequeñas productoras. 

Destacó la importancia de los programas de impulso para los jóvenes emprendedores. “En mí estado –Guerrero-, desafortunadamente a muchos de esta población a veces los atraen grupos delictivos que los lastiman”. 

Su compañera de bancada, Edith Yolanda López Velasco, resaltó la importancia de tener aseguradas todas las hectáreas del país e hizo votos para orientar a los agricultores al respecto. “Hoy Sagarpa tiene un nuevo rostro y rumbo; ha emprendido un arduo trabajo en favor del campo”. 

Los funcionarios de Sagarpa aseguraron que todas sus acciones van encaminadas a recuperar suelos, mejorar la tecnificación de riego, aumentar la producción agropecuaria, detonar el crecimiento del pequeño productor y apoyar a las mujeres del medio rural. 

Indicaron que, en 2016, hubo una reingeniería de los programas, que ha permitido trabajar de manera coordinada con los estados y atender a los productores con un enfoque lucrativo. Resaltaron la necesidad de promover en la población campesina y pesquera el bienestar y su incorporación al desarrollo nacional, dando prioridad a zonas de alta y muy alta marginación e indígenas.  

María Sofía Valencia Abundis, directora general de Capacidades y Extensionismo Rural de la Sagarpa, resaltó que el objetivo es desarrollar capacidades y asistencia técnica al pequeño productor que forme parte de las unidades económicas rurales familiares, que corresponden a estratos de subsistencia con y sin vinculación al mercado, y aquellas clasificadas en transición, primordialmente enfocadas hacia proyectos de los jóvenes. 

Víctor Celaya del Toro, director general de Atención de Cambio Climático en el Sector Agropecuario, precisó que para este año se le autorizaron 4 mil millones de pesos, pues México tiene 250 millones de hectáreas en el territorio nacional, 110 millones destinadas a la ganadería y 22 millones a la agricultura, por lo que cualquier sequía, helada, ciclón o inundación, “ineludiblemente le va a pegar al campo y a la actividad agropecuaria, principalmente a los pequeños productores”. 

Sostuvo que todo el presupuesto de la Sagarpa está protegido por una administración de riesgos. Respecto a cuánto se puede llegar a afectar o siniestrar, comentó que “eso depende de la naturaleza. El gobierno no se la juega, compra los seguros. Se han logrado proteger 10 millones 200 mil hectáreas con los gobiernos de los estados y medio millón con los productores, así como 40 millones de cabezas de ganado”. 

Otros funcionarios asistentes a la reunión fueron: Sebastián Peña Maldonado, director general adjunto de la Subsecretaría de Agricultura; José Pablo Cortes Torres, director de Operación y Control Regional; José Merced López, representante de la dirección de Desarrollo Territorial; Ignacio de Jesús Lastra Marín, director general de Zonas Tropicales, y Ana Livia Leyva Hernández, asesora de la Coordinación General de Enlace Sectorial.