home Perspectiva de género Los derechos de Mujeres Prohibidas

Los derechos de Mujeres Prohibidas

La artista visual Cecilia de Lima habló del impacto que le causaron las mexicanas
Por Cristóbal Torres

México, 18 de mayo (Notimex).— La artista visual peruana Cecilia de Lima, creadora de Mujeres Prohibidas, un proyecto de concientización sobre los derechos femeninos, aseguro que es importante que este sector de la población tenga plataformas para poder expresarse y utilizar el arte como catarsis en la narración de historias.

      En el marco del Día Internacional de los Museos, la artista dialogó con Paola García, encargada del Área de Programas Públicos del Museo del Palacio de Bellas Artes, y Cecilia Reyes, subdirectora del Área de Mediación y Programas Públicos del recinto, en una transmisión en vivo efectuada a través de las redes del MPBA.

      Detalló que fue el libro Cinturón de Castidad. La mujer de clase media en el Perú, de Maruja Barrig, el que le motivó a realizar la iniciativa. Cuenta los testimonios de tres féminas del siglo XIX y lanza la pregunta de si ha habido un avance en los derechos del sector. Al ver que faltaba mucho por hacer, empezó a buscar información.

      Explicó que el nombre de Mujeres Prohibidas surge de la imposibilidad de desarrollarse. Pero se trata de un ser que, «a pesar de todas las situaciones que haya podido tener en un momento de su vida, logra salir adelante; son historias que merecen ser visibilizadas a través del arte”.

      Al respecto, recordó sus experiencias como tallerista en el Museo del Palacio de Bellas Artes, donde el primer reto fue enfrentarse con historias de las participantes que le costaron trabajo manejar, por lo que para ella lo ideal sería contar con apoyo psicológico. Al mismo tiempo, lo que más le llamó la atención de las mexicanas es su empoderamiento; “desde el momento que caminan tienen una fuerza que se posiciona del espacio. Eso me gusta muchísimo”.

      Este año la efeméride tiene como temática «Museos para la igualdad: diversidad e inclusión», y sobre ello llamó la atención Cecilia Reyes al externar su deseo de «que el museo se convierta en un punto de encuentro» que celebre las diferencias, entre personas y grupos humanos, ya que «no existe un solo público».