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Diputados buscan concientizar sobre obesidad y sobrepeso, situación de migrantes y donación sanguínea

Con el propósito de sensibilizar a la población sobre los riesgos a la salud por sobrepeso, obesidad y trastornos alimenticios, situación de migrantes y refugiados, y crear conciencia respecto a la importancia de la donación de sangre, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó declarar una Semana Nacional para cada tema.

Durante la sesión de hoy, se acordó declarar la segunda semana de noviembre de cada año como Semana Nacional para Prevenir el Sobrepeso, la Obesidad y Trastornos de la Conducta Alimentaria, a fin de informar y concientizar a la sociedad acerca de las medidas para prevenir y tratar esos padecimientos, así como las enfermedades crónicas relacionadas, promover hábitos alimenticios saludables y la práctica de actividad física.

El dictamen con proyecto de decreto de la Comisión de Gobernación y Población, avalado por 431 votos a favor, tres en contra y cuatro abstenciones, estima que aproximadamente 10 por ciento de la población (12 millones de personas) padecen sobrepeso, obesidad y trastornos de la conducta alimentaria, por lo que la conmemoración de una semana nacional permitirá sensibilizarla sobre sus riesgos.

Refiere un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el cual indica que México es el segundo país con mayor índice de obesidad y manifiesta su preocupación por las enfermedades relacionadas, como la diabetes, que afecta al 15.9 por ciento de los adultos mexicanos “más del doble que el promedio de dicha organización”.

La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) de 2016 precisa que en México padecen sobrepeso y obesidad 72.5 por ciento de adultos; cuatro de cada 10 jóvenes y uno de cada tres niños. En una encuesta del Inegi se indica que 41.7 por ciento de la población encuestada realiza actividad deportiva o ejercicio físico. “Entre 50 y 60 por ciento de los niños no realiza actividad física suficiente y en su dieta predominan los alimentos altos en azúcar y grasas”.

Se señala, además, que tres de cada cuatro camas de hospital están ocupadas por pacientes con enfermedades relacionadas con estos padecimientos y el gasto para atender este grupo poblacional es de 19 mil millones de pesos, “30 por ciento del presupuesto destinado a salud”.

El siguiente dictamen, de la misma Comisión, aprobado por 427 votos en pro, 10 en contra y 8 abstenciones, declara la tercera semana de diciembre de cada año, como la “Semana Nacional de las Personas Migrantes y Refugiadas”, para exponer la crítica situación de nuestros migrantes y de quienes transitan por el país, y sensibilizar y evitar fenómenos de xenofobia que traten de oscurecer la aplicación de las normas supremas.

Se busca sensibilizar a la población y los tres órdenes de gobierno sobre el fenómeno de expulsión de migrantes y de personas en tránsito hacia la Unión Americana o el regreso de connacionales al país; del rol jurídico que corresponde al Instituto Nacional de Migración, a la Comisión Mexicana de Ayuda a los Refugiados, y las diferentes secretarías de Estado, gobiernos estatales, municipales y organizaciones no gubernamentales.

México, subraya el documento, es receptor y emisor de migrantes; es tierra de tránsito y retorno de personas que “encuentran en el país un lugar de destino o un espacio de tránsito hacia su destino final”, por lo que se han procurado medidas legales para dar cumplimiento a los términos constitucionales y a los tratados internacionales.

Precisa la importancia del tema en el país, de donde emigran 13 millones de mexicanos (poco más de 10 por ciento de la población nacional), de los cuales 98 por ciento va hacia Estados Unidos; mientras que México recibe una migración del uno por ciento, poco menos de un millón 300 mil migrantes, de los que 74 por ciento viene de Estados Unidos. “Caso especial, indica, es la inmigración de menores de edad de Centroamérica a México, que desafortunadamente ha elevado su cifra”.

Asimismo se aprobó con 446 votos a favor, 4 en contra y 9 abstenciones declarar la segunda semana de junio de cada año como la "Semana Nacional del Donante de Sangre y sus Componentes".

El documento señala que en México existen más de 550 bancos de sangre y 64 instituciones de transfusión sanguínea con sus sucursales y la Organización Mundial de la Salud ha recomendado que se obtengan al mes cinco millones de donaciones de sangre, pero se registra un millón 700 mil, lo que representa un déficit de 65 por ciento de donaciones.

De ahí la importancia de concientizar de la enorme y urgente necesidad de la donación de sangre y sus componentes, para tener un suministro continuo, con calidad, seguridad y disponibilidad, a fin de salvaguardar el derecho a la salud de la población. Ello coadyuva a elevar la esperanza y calidad de vida de pacientes con enfermedades potencial o realmente letales, y permite realizar complejos procedimientos médicos.

La consolidación de una semana nacional contribuirá a la obtención del líquido orgánico y sus componentes en mayor cantidad y calidad; a concentrar los servicios como comunitarios y resaltar la necesidad de compartir vida mediante ese acto altruista, creando un espacio temporal de reflexión sobre sus beneficios.

Una vez aprobados los tres dictámenes con proyecto de decreto, se enviaron al Ejecutivo para los efectos constitucionales.

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