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Batalla por derechos de la mujer no es una lucha de géneros

Al inaugurar en la Cámara de Diputados el foro “Conductas Violentas en Contra de la Mujer por Razón de Estereotipo de Género”, la coordinadora del grupo parlamentario de Morena, diputada Rocío Nahle García, manifestó que etiquetar un día para la lucha por los derechos de la mujer, no es una batalla de géneros.

En el marco del Día Internacional de la Mujer, que se conmemora el 8 de marzo de cada año, pidió trabajar para que “mañana, los derechos sean equitativos, pues las mujeres no queremos más que los varones, queremos lo mismo”.

“Es importante que este día no pase como cualquier otro, hay que marcarlo para respetar a las mujeres y de igual forma a los hombres ante una equidad justa”, expresó.

Destacó los avances construidos en materia de igualdad, pues tan sólo en la Cámara de Diputados, el 42 por ciento de los legisladores son mujeres, que las acerca cada vez más al 50 por ciento, lo cual también debe reflejarse en otros rubros como el social y el deporte, en donde México cuenta con atletas destacadas.

En este foro, explicó, se hablará sobre violencia de género en los distintos rubros de la sociedad, en un México en donde actualmente más mujeres que hombres se gradúan de una licenciatura.

La diputada Concepción Villa González (Morena), organizadora del evento, indicó que el objetivo es concientizar, advertir y prevenir sobre la violencia de género en todas sus formas. El reto es mayor, se han dado grandes avances, “pero no todo está terminado, esta violencia parece ser no sólo tolerada, sino fomentada a través de relaciones sociales de desigualdad”.

Ejemplo de ello, los roles asignados desde el núcleo familiar donde reproducen comportamientos sobre el significado de ser hombre o mujer, y en donde se impone el dominio masculino sobre el femenino.

“Al interior del hogar, la división de tareas es altamente diferenciada, en donde se vislumbran los estereotipos de género y se reproducen socialmente cada día; algunos de ellos confinan a la mujer como ama de casa y al varón como proveedor, de lo cual se desprende la escasa participación de mujeres en la política”.

Agregó que los hombres han sido formados en contexto de desigualdad, en donde su papel es de fuertes, aguerridos, autoritarios y dirigentes de familia.

Ana María Nolasco, de la Organización de las Mujeres en Defensa de sus Derechos, resaltó que el feminicidio es el grado extremo de violencia, “pero no es lo último pues al pedir justicia hay discriminación por cuestiones de estereotipos al considerar que la mujer que no era buena y merecía castigo”.

Los estereotipos han contribuido a las barreras que limitan el desarrollo de mujeres, especialmente por dichos y acciones, como programas de televisión en donde usan las figuras clásicas de mujeres o madres buenas y malas.

“Siguen usando a la mujer como imagen sexual y como objeto para fines comerciales, además de que proliferan canciones con mensajes en contra o que falta a la igualdad de género”, comentó.

Al exponer el tema de “Nuevas Masculinidades, el papel del Hombre en la Familia”, David García Huerta, académico de la Universidad Iberoamericana, explicó que desde antes de nacer a niñas y niños ya les asignan un rol, pues socialmente se les dice como deberán comportarse.

“Nuestro género como personas se construye de manera social y cultural, pero el panorama se complica cuando alguien no encaja o no cumple con las condiciones que la sociedad impone, como en el caso de hombres que gusten de otros hombres”, precisó.