El Pleno de la Cámara de Diputados avaló, con 353 votos, un dictamen que adiciona un párrafo al artículo 92 de la Ley Federal de Protección al Consumidor, para determinar que cuando proceda la devolución del importe de un producto, los proveedores deberán efectuarla en la misma forma de pago con la que se realizó la compra, a fin de garantizar los derechos de los consumidores.
El dictamen, que se envió al Senado de la República para sus efectos constitucionales, precisa que cuando se aplique la devolución de la cantidad pagada por un producto, ésta se efectuará utilizando la misma forma de pago con que se realizó la compra, pudiendo ser distinta si el consumidor la acepta al momento en que se efectúe el reembolso.
Refiere que es común que al comprar un producto o servicio no correspondan con lo publicitado por el proveedor, se encuentran en mal estado o simplemente no satisfacen las necesidades del consumidor.
En estos casos, el artículo 90 de la Ley Federal de Protección al Consumidor (LFPC) establece que, cuando el producto adquirido no corresponda a la calidad, marca o especificaciones establecidas, el consumidor tiene derecho a que le sea repuesto el dinero pagado por él.
Sin embargo, la LFPC no fija términos ni condiciones sobre cómo deberá hacerse el procedimiento de devolución, siendo que algunos establecimientos se apegan a las políticas internas o lineamientos que cada empresa tiene; en otros casos, los proveedores se reservan, indebidamente, el derecho de hacer efectiva la devolución.
Incluso, algunos negocios se protegen de esta obligación colocando una leyenda en el ticket de compra, donde señalan que el método de devolución no afecta los derechos del consumidor, dejándolo sin alterativas para recibir la devolución en la misma forma de pago en que se adquirió el servicio o producto.
Ante ello, la reforma precisa que es de elemental justicia que el proveedor realice la devolución de igual forma en que se costeó, es decir, utilizando la misma forma de pago, ya que es común que se entreguen monederos electrónicos, tarjetas de regalo o mercancía como cambio, misma que se tiene que utilizar dentro de la misma empresa, obligando al consumidor a comprar otro producto o servicio.