home Legislativas Adecuar marco jurídico en salud y educación superior para enfrentar retos en el año 2030

Adecuar marco jurídico en salud y educación superior para enfrentar retos en el año 2030

 

Uno de los mayores retos de México para el 2030, es revisar y adecuar el marco jurídico nacional en materia de salud para atender nuevas necesidades médicas de la población, y ampliar la oferta universitaria que forme más especialistas en enfermedades crónico degenerativas, principal enemigo para aumentar la expectativa de vida de los mexicanos, afirmó el diputado Miguel Ángel Sulub Caamal (PRI). 

Durante el foro “Aumento en la expectativa de vida al nacer” en el marco de la Agenda México 2030, el legislador urgió a identificar áreas de oportunidad y evaluar planes académicos universitarios que se ofrecen a los jóvenes, ya que existe un número muy reducido de nefrólogos -mil 200- y de geriatras a nivel nacional, que se requerirán en mayor cantidad en la próxima década. 

“Se necesitarán estos expertos que atiendan las enfermedades de adultos mayores y ofrezcan asistencia adecuada a quienes enfrentan padecimientos crónico degenerativos como diabetes, hipertensión arterial, obesidad, accidentes cardiovasculares y renales”, precisó. 

El diputado por Campeche destacó la necesidad de educar para prevenir enfermedades, mediante campañas de concientización; sin embargo, las recomendaciones no tendrán éxito si los ciudadanos no escuchan los consejos y cambian su forma de alimentarse, hacen ejercicio y manejan el estrés; sólo así se reducirá la incidencia de padecimientos graves como los crónico degenerativos que son, sin duda, los principales enemigos para aumentar la expectativas de vida en el país. 

Resaltó la importancia de conocer las propuestas de la sociedad civil frente a los retos y oportunidades que plantean grandes temas nacionales como es la expectativa de vida y salud, para vincularlas con el trabajo legislativo y saber qué adecuaciones jurídicas deben impulsarse y reflejarse en las políticas públicas para corregir faltantes y ofrecer soluciones viables. 

“Es vital la participación y concientización de los ciudadanos, ya que en materia de salud todos tenemos que participar”, afirmó. También aseguró que “la buena salud añade vida a los años”, y ese debe ser el propósito de todos los sectores para mejorar los sistemas de salud, pero sobre todo aumentar la expectativa de vida en México. 

Luis Miguel Gutiérrez Robledo, director general del Instituto Nacional de Geriatría, sostuvo que para incrementar la expectativa de vida se requiere elevar el monto de recursos en salud de forma integral, modificar el estilo de vida basado en la concientización para definir el tipo de alimentación que reduzca riesgos de padecer enfermedades crónico degenerativas, combatir la violencia y disminuir la incidencia de accidentes automovilísticos, donde las principales víctimas son los jóvenes. 

En los últimos tiempos los mexicanos han perdido cuatro años en la esperanza de vida respecto al promedio de los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), ubicado en 80.5 años. 

Destacó que la esperanza de vida entre los mexicanos más pobres y los ricos es de 30 años, por lo que elevarla se vincula con erradicar la pobreza. 

Cristina Ramos Reyes, doctora en Economía, resaltó que la pobreza propicia desigualdad en el acceso a los servicios de salud, los cuales deben mejorarse, ya que el sector público adolece de una buena atención con sentido humano que respete a los pacientes, en particular a los de la tercera edad, cuya población actual de 13 millones aumentará exponencialmente en la próxima década. 

Urgió a mejorar las leyes para atender a este sector, que no tiene una auténtica representación ni vinculación con los diputados. Pidió promover “una vejez activa” que aproveche la sabiduría y conocimiento de las personas en esta etapa en beneficio social. 

Se requiere una población longeva con calidad de vida, mediante la prevención de padecimientos crónico degenerativos a partir de la educación en la familia. Expresó su preocupación porque en 20 años, las enfermedades mentales ocuparán el primer lugar como motivo de consulta, y solicitó privilegiar el abasto suficiente de medicamentos. 

Jesús Benítez Granados, médico cirujano de la UNAM, propuso evaluar todos los grupos de edad, en particular entre 30 a 40 años para reducir los riesgos de que padezcan cáncer de próstata y mama. Desde ahora debe hacerse un diagnóstico oportuno que minimice los costos de salud y que permita que tengan una buena expectativa y calidad de vida. 

La pérdida de la función renal tendrá un impacto significativo a nivel económico y de salud en los próximos años, a raíz de las enfermedades crónico degenerativas, por lo que deben optimizarse los recursos que se tienen y mejorar la calidad de la atención médica en los hospitales con el actual personal. 

Resaltó la necesidad de disponer de más especialistas en diversos campos, ya que, por ejemplo, existen sólo 350 genetistas a nivel nacional. 

Jorge Alberto García Cadena, médico cirujano de la UNAM, señaló que en 2030 México va a ser un país de viejos, por lo que desde ahora debe impulsarse la educación de la salud, para cambiar hábitos alimenticios y promover revisiones periódicas que eviten la incidencia de cáncer de próstata, cérvico-uterino y de mama, ya que todavía existe resistencia a hacerlo. 

La insuficiencia renal es la principal secuela provocada por la diabetes, pese a ello sólo existen mil 200 nefrólogos en el país que la atienden y ocupa el tercer lugar de incidencia en la tabla de enfermedades del sector público, absorbiendo un importarte presupuesto. 

Previó que en la próxima década se requerirá un mayor número de geriatras por el envejecimiento de la población. Se pronunció por la equidad y calidad en los servicios de salud. 

Para Irineo Escudero Licona, médico cirujano de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo, mientras no exista equidad en el acceso a la salud no mejorará la calidad y esperanza de vida de la población. Propuso programas educativos para manejar el estrés, a fin de reducir las enfermedades crónico degenerativas. 

Señaló la conveniencia de establecer una red de apoyo a médicos de segundo y tercer nivel por medio de la tecnología, para optimizar los recursos de hospitales y el conocimiento del personal en beneficio de los pacientes. 

“Debemos educar a todas las personas desde la familia porque se propaga la obesidad entre niños y adultos, que van a tener riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular. Se debe reflexionar sobre la responsabilidad que tiene cada uno en mantener la salud y lograrla, para obtener una longevidad con buen nivel de vida. 

Durante el foro, se indicó que las mujeres mexicanas tienen una expectativa de vida mayor a la de los hombres, 77.5 y 72.1 años, respectivamente, de acuerdo al Inegi. 

En 20 años, las enfermedades mentales serán el principal motivo de consulta en el sector público, superando la diabetes, hipertensión arterial y cáncer, con lo que padecimientos que antes no eran prioritarios pasarán a serlo como el suicidio no sólo en jóvenes sino en adultos mayores, temas que exigirán soluciones.